Microrreservas de flora para proteger enclaves puntuales

El Catálogo de Flora Protegida eleva a 12 las especies en peligro de extinción en Castilla y León

En breve, espacios como la playa del Rostro en las Arribes del Duero, en Salamanca; la Vega de Liordes, en la zona leonesa de Picos de Europa; las laderas del castillo de Monzón, en Palencia, y las riberas del Bibey, en la alta Sanabria zamorana, entre otros lugares, contarán con el marchamo de microrreservas de la flora. Esta nueva figura de protección, que se aprobará en las próximas semanas en Consejo de Gobierno, nace en Castilla y León con el fin de proteger aquellos espacios de pequeño tamaño que contengan o sirvan de refugio a poblaciones de flora amenazadas. Con esta estrategia, que ya se encuentra implantada en comunidades como el País Vasco, Valencia, Aragón y Castilla-La Mancha, la Consejería de Medio Ambiente crea el primer Catálogo de Flora Protegida, en el que se incluyen más de 200 especies con la categoría de atención preferente, otras 50 con la de vulnerables y 12 en peligro de extinción. La nueva norma también describirá y normalizará el "aprovechamiento regulable" de hasta otras ocho plantas. El mapa botánico de Castilla y León y León es especialmente rico en flora silvestre vascular con unas 3.300 especies censadas, debido a su posición biogeográfica, entre la región mediterránea y la atlántica. El catedrático de Botánica en la Universidad de Salamanca, Francisco Amich, que ha colaborado en la elaboración de este primer Catálogo, cree que «es una herramienta imprescindible para la protección de esta riqueza floral».

Fuente: El Día de Valladolid
Enlace: