Las cámaras de vigilancia contra incendios ayudan a combatir la recolección ilegal de setas

Hace unos días, el sistema de vigilancia por cámaras térmicas que el Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Soria tiene desplegado en esta provincia para la detección temprana de incendios forestales detectó dos focos de calor en el término municipal de El Royo. Puestos en contacto con la Guardia Civil, se comprobó que las alertas estaban ligadas a fogatas encendidas por los ocupantes de dos campamentos ilegales de recolectores rumanos de setas, a los que se obligó a apagar los fuegos y a abandonar los asentamientos.

Al día siguiente, agentes medioambientales de la Junta, en colaboración con la Guardia Civil,  procedieron al desalojo de uno de estos campamentos que aún permanecía instalado, denunciándose a 14 ciudadanos de nacionalidad rumana por el uso no autorizado de fuego y acampada ilegal.

Durante estos días han continuado las intervenciones realizadas por los agentes medioambientales, forestales y celadores de la Junta de Castilla y León para asegurar las condiciones del aprovechamiento micológico regulado con las suficientes garantías.

El Servicio Territorial de Medio Ambiente de Soria cuenta entre sus efectivos con más de 120 empleados públicos (agentes medioambientales, agentes forestales y celadores), distribuidos entre las 12 comarcas en las que está dividida la provincia. Durante la campaña micológica este personal combina sus funciones habituales con servicios de vigilancia específicos de control micológico, repartidos en varios turnos a lo largo del día y de la noche, incluidos fines de semana. Con estos servicios se pretende controlar las prácticas recolectoras para evitar daños al monte y ofrecer un contexto de recolección seguro.

Decomisos de setas

En estas últimas jornadas se han decomisado 158 kilogramos de níscalos y 56 de boletus, alcanzando una cifra total aproximada en lo que va de campaña micológica de otoño de 3.280 kilogramos (2.318 de níscalos y 962 de boletus) decomisados a recolectores ilegales, en su mayoría ciudadanos de nacionalidad rumana.

De las intervenciones más recientes destacan los 130 kilogramos de níscalos decomisados el pasado día 22 en San Pedro Manrique por tres agentes medioambientales y un celador de Medio Ambiente, denunciándose a seis personas de nacionalidad rumana por recolectar sin licencia y a otros nueve, también de nacionalidad rumana, por exceder el cupo permitido.

En la comarca de Covaleda, los agentes medioambientales, con la colaboración con la Guardia Civil, denunciaron a siete recolectores, cuatro de ellos de nacionalidad rumana, por carecer del oportuno permiso, decomisando 56 kilogramos de boletus y 3 de níscalos, los días 22 y 23. En San Leonardo de Yagüe se han decomisado 25 kilogramos de níscalos.

Hasta el momento hay registradas en la Delegación Territorial (aún quedan muchas por recibir en el Registro) 131 denuncias (97 a ciudadanos extranjeros y 34 a españoles): 109 por recolectar sin autorización, 19 por acampada ilegal, 3 por transitar por pistas forestales prohibidas y una por realizar fuego sin autorización.