Alerce europeo, el árbol de 2012

La fundación alemana “Árbol del Año” elige un árbol cuya madera se utiliza en construcción y enología. Además, es la única conífera que se desprende de sus acículas cuando llega el frío

Los usan para fabricar casas. También para que el vino adquiera un sabor único, imposible de conseguir con otras maderas. Además, se le respeta por esa imagen dorada tan típica que da al otoño europeo gracias a que es la única conífera que pierde sus agujas cuando arrecia el frío. El alerce europeo, cuyo nombre científico es Larix decidua, fue elegido el árbol del año 2012 por la fundación "Baum des Jahres" (“Árbol del Año”), que en un comunicado explica además que falta investigar mejor por qué este árbol se desprende de sus agujas, a diferencia de todos los demás, que las mantienen en época de frío. Se especula que es un mecanismo de defensa evolutivo que le permite soportar mejor las bajas temperaturas de hasta -40° que afronta en los crudos inviernos del Viejo Continente. Arrasado antaño en el afán por obtener más tierras de cultivo, en la actualidad el alerce europeo recupera terreno en los bosques. Pero el doctor Silvius Wodarz, de la fundación "Baum des Jahres", piensa que deben plantarse más alerces también en las ciudades, como una forma de preservar su enorme valor, asegurar su sobrevivencia y expandir los dominios de una especie nativa que en condiciones ideales puede alcanzar los 40 metros de altura y conseguir un tronco de 1,5 metros de grosor. El alerce crece a más de 2000 metros de altura en los Alpes y los Cárpatos (aunque también hay ejemplares a menor altura, especialmente en Inglaterra), donde cumple una importante función como barrera de protección contra avalanchas de nieve. Estudios realizados en Inglaterra demuestran que este árbol en particular cumple mejor la función de mejorar la calidad del aire en las ciudades, gracias a su mayor tolerancia a la contaminación atmosférica. Además, con su resina, llamada también trementina, se hacen ungüentos y otros productos cosméticos.

Fuente: Deutsche Welle
Enlace: http://www.dw-world.de/dw/article/0,,15476279,00.html?maca=spa-rss-sp-ecol-2628-rdf